viernes, 20 de julio de 2012

Buscaba sus labios al amanecer


Buscaba sus labios al amanecer cuando volvía a despertarse solo, en aquella inmunda cama de matrimonio que hacía siglos no era compartida.
Pensaba en ella cada día, en como la había amado en otros tiempos, pensaba en estrecharla entre sus brazos, en besarla tiernamente hasta llegar al éxtasis, pero ya era imposible, eslla no estaba allí a su lado, se había ido con otro.
Pero lo peor llegaba por la noche, con ese silencio sepulcral propio de un cementerio que había en su habitación. Los gemidos de placer ya no existían, tampoco los reproches mutuos -“tienes los pies fríos” o “no me hagas cosquillas”. Ahora todo eso era vacío, lo sustituía un monólogo sobre la soledad y el sentido trágico, un deseo de muerte apenas ocultado.


Julss

No hay comentarios:

Publicar un comentario